“El clamor general para que se garantice la seguridad en la UC está por encima de cualquier interés personal o de grupos y esa fue la prioridad en la decisión del Consejo Universitario al permitir el operativo de saneamiento por parte de los cuerpos de seguridad en el Campus Bárbula”, manifestó la rectora de la Universidad de Carabobo, profesora Jessy Divo de Romero.
La rectora informó que este sábado autoridades de la Policía de Carabobo, así como de Pipsuc y de Planta Física de la UC, realizaron un recorrido en zona 3 donde se realiza el operativo y decidieron sellar y soldar las puertas de acceso a los locales, hasta que los responsables de los mismos se presenten ante los decanos de las tres facultades afectadas para tratar aspectos inherentes a esas ocupaciones y actividades comerciales.
Señaló que este proceso implica revisar los expendios, metros que ocupan, contratos suscritos, responsabilidades, desempeños y obligaciones, así como tratar causales de anulación de contrato por incumplimiento de cláusulas.
Igualmente comentó que la clausura se mantiene y que se requiere el día lunes para continuar con traslado de enseres y culminar trabajos de limpieza en la referida zona universitaria.
Para la máxima auroridad ucista el problema de inseguridad ha sido el más difícil de prevenir y contrarrestar y el que ha generado angustia constante a todos los miembros de la comunidad universitaria, porque que afecta grave y directamente a los estudiantes que son la razón de ser del alma máter carabobeña.
El desalojo de vendedores ambulantes y demolición de quioscos es una medida de impacto que estuvo basada en informes de inteligencia de los cuerpos de seguridad del estado que han trabajado conjuntamente con la institución ante la problemática de inseguridad, explicó la rectora.
Cabe destacar que el índice delictivo que en los últimos meses había logrado disminuirse, tuvo un retroceso con el asesinato de una persona dentro del campus universitario enclavado en Bárbula, lo que generó inmediatamente la reacción interna de las autoridades de la institución.
Aseveró que en reunión con el gobernador del Estado Carabobo, Francisco Ameliach solicitó mayor protección para el Campus Bárbula y muy especialmente el apoyo para que no vuelvan a instalarse estructuras ilegales para expender alimentos y otros productos en las zonas donde ya fueron eliminadas ni en otros sectores.
“Para lograr este objetivo es indispensable la colaboración y apoyo de toda la comunidad universitaria, el sentido de pertenencia debe prevalecer para entender que no debe permitirse la proliferación de tarantines ilegales que no cumplen con las normas mínimas de salubridad, seguridad y que además son aprovechados por la delincuencia”, añadió.
Divo de Romero dijo que el desarrollo del operativo de la GN y Policía de Carabobo, es imprescindible para decidir sobre la reanudación de clases “porque hay que garantizar las condiciones mínimas en materia de seguridad a los estudiantes y al personal que hace vida en esa sede, por eso, las medidas complementarias y el llamado al reinicio de las actividades será tema central el día lunes 22 en Consejo Universitario”, acotó.
Hizo mención a que están a la espera de los informes correspondientes de los cuerpos de seguridad para conocer el resultado de las inspecciones, desalojos y demolición, en curso.
Para finalizar dijo que desde que se inició el saneamiento ha recibido una muy buena respuesta de muchos estudiantes, obreros, administrativos y profesores quienes han hecho llegar mensajes de apoyo y solidaridad para con la decisión del CU de permitir las acciones de la GN y Policía de Carabobo en la búsqueda de la solución definitiva a la grave problemática de inseguridad en el campus universitario.